Esta punta de la isla es una muestra de la fuerza del volcán. Un conjunto de coladas de enorme intensidad que provienen de erupciones de la última etapa volcánica de El Hierro, en el extremo de la dorsal norte, una de las tres que dan forma a la isla. Aunque es una playa de gran belleza, está desaconsejada para el baño debido a sus fuertes corrientes y los desprendimientos de tierra, pero ello no implica acercarse para ver esta singular playa de arena roja.